domingo, 29 de marzo de 2020

LOS seis PILARES de la MORAL -3: PUREZA











El pilar de la PUREZA








                                                Figura 1: Elaboración propia a partir de Haidt, J


Estos  seis pilares  tienen un carácter universal y están presentes en los fundamentos morales de todas las culturas.






Jonathan Haidt  también se refiere a este pilar llamándole el pilar de la SANTIDAD. Dadas las connotaciones religiosas del término, utilizo el de PUREZA pensando que se ajusta mejor a lo que significa dicho pilar.


“El desafío de adaptación original que impulsó la evolución del fundamento de la Santidad, fue la necesidad de  evitar patógenos, parásitos y otras amenazas que se propagan por contacto físico o proximidad [1]





“El fundamento de la  PUREZA /Degradación evolucionó inicialmente en  respuesta al desafío adaptativo del dilema del omnívoro, y después al desafío más amplio de vivir en un mundo de patógenos y parásitos. Incluye al sistema inmunológico asociado al comportamiento, que se extiende a una amplia gama de objetos simbólicos y de amenazas. Permite a las personas conferir a objetos valores irracionales y extremos, tanto positivos como negativos, que son importantes para mantener a los grupos unidos [2]

El dilema del omnívoro


 Se refiere Haidt con el  ‘dilema del onmívoro’al hecho de que los humanos, al igual que las ratas y las cucarachas,  comemos de todo, tanto plantas como animales,  lo cual nos proporciona  algunas ventajas y algunos inconvenientes. Como ventajas  está la de que en cualquier medio podemos encontrar algo que comer. La desventaja está en que debemos aprender qué comer ya  que los alimentos pueden ser tóxicos, estar infectados con microbios o parásitos, etc.

El dilema del omnívoro podemos relacionarlo con la neofilia (atracción por las cosas nuevas: en este caso alimentos desconocidos) y con la neofobia (el miedo a las cosas nuevas: en este caso  alimentos desconocidos)

La emoción del asco evolucionó inicialmente para optimizar las respuestas al dilema del omnívoro [3]



La emoción básica del asco


Las emociones básicas o primarias, son muy visibles y están muy definidas. Ya Darwin habló de ellas.  Aun cuando hay varias clasificaciones de las mismas, Damasio menciona las siguientes: miedo,  ira, asco, sorpresa, tristeza y felicidad.
Son universales, fácilmente identificables en personas de diversas culturas,  y en la especie humana en los niños y en los adultos.
















Son las más representativas de lo que entendemos por emociones y fue su estudio el que proporcionó la base para el desarrollo de la neurobiología de las emociones. Las expresamos a través del lenguaje no verbal y las podemos identificar en otra persona en décimas de segundo.



La  emoción del asco juega un papel muy importante en  el  pilar moral de la Pureza.  Para que hoy,  ante un alimento putrefacto y peligroso que si lo ingerimos  nos puede  provocar incluso la muerte, ya no tengamos que probarlo, muchos antepasados nuestros que aún no tenían desarrollada dicha emoción, pagaron con su vida para que nosotros, en este estadio evolutivo en el que nos encontramos,  ante dicho alimento sintamos asco que nos invita a no acercarnos y mucho menos a  probarlo tomando la decisión de rechazándolo. La emoción asco (S) nos hace tomar conciencia, a nivel cognitivo (P)  de estar ante algo contaminante y peligroso. Podemos incluso a nivel fisiológico sentir nauseas. Finalmente damos el comportamiento (A) de alejarse.  

Para nuestros antepasados se cumplía la rigurosa la ley siguiente:
los que tenían una sensación de asco equilibrada,  consumían más calorías que los que sentían un asco exagerado  y menos microbios que los sentían un escaso asco. Un asco equilibrado facilitaba la supervivencia.

El  ASCO nos lleva a sentir   disgusto, aversión y rechazo a aquello que tenemos delante invitándonos a  alejarnos del objeto que nos  lo produce.

Paul Rozin, considerado el mayor experto mundial en repugnancia, nos habla de distintos tipos de asco: Asco esencial, Asco interpersonal, Asco elaborado y Asco social. Dice que el asco interpersonal tiene cuatro grupos de desencadenantes: lo raro, lo enfermizo, lo desgraciado, lo socialmente contaminado.

Leer: "Sobre el asco en la moralidad"
http://www.scielo.org.mx/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0185-24502010000100002

Paul Ekman nos habla del “asco de estar harto” [4] P.  220



El “sistema inmune conductual”


Por otro lado, Mark Schaller y su  Sistema inmune conductual”, nos demuestra que el asco forma parte del mismo. Este sistema,  formado por todo un conjunto de módulos cognitivos,  se activa ante signos de infección o enfermedad en otras personas y hacen que deseemos alejarnos de ellos.  Para prevenir infecciones es mucho más efectivo lavar las manos, los alimentos, evitar a los leprosos y a las personas sucias que dejar que entren en el cuerpo los microbios,   virus y demás patógenos y confiarlo todo a nuestro sistema inmunológico para que dé la batalla y acabe con ellos.


¿Pueden explicarse, algunas de las anomalías que estamos observando a lo largo de esta pandemia,  a través del “Sistema inmune conductual?


Nos cuenta Paul Collier, que   cuando  sucedio la crisis del Sida, lo normal sería que la fuerza de la reciprocidad dentro de una sociedad, generara obligaciones con los conciudadanos que excedan a aquellas que tenemos a escala global. Sin embargo, a veces tenemos obligaciones con algunos ciudadanos de otros países que sobrepasan las que tenemos con nuestros conciudadanos. Sin embargo, cuando algún  presidente de algunas naciones hablaron de echar una mano a África, la respuesta de los W.E.I.R.D., acrónimo de  las siglas de “Western, Educated, Indusstrialized, Rich and Democratic”, personas occidentales, educadas, industrializadas, ricas y democráticas fue la siguiente:

Los economistas de la salud, influidos por la ideología utilitarista, se opusieron a esta utilización del dinero. Ignorando por completo la fuerza moral del rescate, sostenían que con el mismo dinero se podía salvar más años de vida si se reducía ligeramente el riesgo de mortalidad a través de intervenciones preventivas en otra serie de enfermedades. Al parecer, resultaba más rentable dejar morir a todas las personas  con VIH” [5]

¿Se está priorizando, ante la pandemia actual, las vidas humanas por debajo de    la economía?


Noticias de los medios de comunicación.


Graves tensiones en el sur de Italia: primeros saqueos en supermercados y llamadas a la rebelión
Ciudadanos en dificultad por la crisis lanzan agresivos mensajes en las redes sociales, con llamamientos a la revuelta


 España e Italia fuerzan una nueva cumbre tras el bloqueo de Alemania y Holanda a un plan más ambicioso contra el coronavirus.

España e Italia se levantan de la mesa ante el bloqueo de Alemania y Holanda a un plan económico más ambicioso contra el coronavirus, mientras se multiplican los contagios y los fallecidos.

Portugal tacha de "repugnante" la actitud holandesa.


En  el  ensayo titulado “Los límites de la Repugnancia” el filósofo León Kass  sostiene que la tecnología hace ver,  de forma muy borrosa, los límites morales que no deberíamos sobrepasar. Nos alecciona sobre la idea de que nuestro sentimiento de asco es el que nos puede hacer ver que estamos pasando los límites. Hoy en día todo está permitido, ya no se respeta la naturaleza humana considerándonos como meros instrumentos. Ante ello, nos dice:

“la repugnancia puede ser la única voz que se levanta para defender el núcleo central de nuestra humanidad. Superficiales son las almas que han olvidado cómo estremecerse” [6]


¿Cuántas personas sienten hoy repugnancia ante  determinados dilemas éticos que se están planteando actualmente? :


López Guerrero (Neurovirólogo): "Es imposible que el coronavirus se haya creado en laboratorio"


 - Pregunta:“Dígame, ¿el sistema sanitario puede colapsar?, y ¿de verdad ante la falta de respiradores se está seleccionando quién vive y quién no?
- Respuesta (…) Cuando pase esta pandemia, muchos de nuestros sanitarios van a tener un problema psicológico grave”.


Los políticos


Conviene aclarar, antes de nada, que Jonathan Haidt  a quién estamos siguiendo, hace sus análisis políticos refiriéndose, sobre todo a Estados Unidos. Para entender como clasifica a los distintos Partidos políticos, aporto este gráfico elaborado por mí en base a como los va mencionando a lo largo de su libro:
Sobre los libertarios nos dice:

 “En el cuestionario  sobre Fundamentos Morales, los libertarios y los liberales obtuvieron muy bajas puntuaciones en los fundamentos de la Lealtad, la autoridad y la Santidad (Pureza). Donde los libertarios se separan más de los liberales  es en dos medidas: el fundamento del Cuidado, donde obtienen una puntuación muy baja (incluso más baja que los conservadores) y en algunas  nuevas preguntas que agregamos sobre la libertad económica, donde obtienen una puntuación extremadamente alta  (un poco más alta que los conservadores, mucho más alta que los liberales. [7]

Cada uno puede ubicar a los partidos europeos y españoles en un determinado punto de la escala unidimensional Izquierda – Derecha y analizar cómo priorizan los 6 Pilares de la Moralidad y como se ocupan, a través de medidas concretas,  de cada uno de ellos.

En el post anterior decíamos que según  Haidt, con respecto al Pilar del Cuidado, los liberales (izquierda) dan más prioridad y practican con más intensidad el valor del Cuidado que los conservadores (derecha).

… el cuidado de los conservadores es algo diferente: no está dirigido a los animales ni a personas  de otros países, sino a aquellos que se han sacrificado por el grupo. No es universalista; es más local, y está mezclado con la lealtad 

¿Crees que es extrapolable esta opinión a los dos partidos más representativos que tenemos en España, al PSOE y al PP?                    


Los políticos y el pilar de la Pureza.


Jonathan Haidt se basa en 132.000 encuestas realizadas a través  de YourMorals.org, donde puedes aprender acerca de tu propia moralidad, al mismo tiempo que contribuyes a una  investigación científica en psicología moral. La página en español aparece en:  http://www.yourmorals.org/espanol/

Mide la priorización de las personas según su ideología de cada uno de los Pilares de la Moralidad, a través de la escala siguiente:


Con respecto al Pilar de la Pureza, las puntuaciones van incrementándose desde un 1 que le dan los  ‘Muy liberales’ hasta un 3,5 que le dan los ‘Muy conservadores’.

Con respecto al  Pilar del Cuidado que vimos en el post anterior, las puntuaciones van descendiendo desde un 4 que le dan los ‘Muy Liberales’ hasta un 2,8  que le dan los ‘Muy conservadores’



 ¿Podríamos haber abordado esta pandemia actual,  y terminar con el coronavirus de forma más rápida, efectiva y con menos costes humanos y económicos,  si todos los partidos políticos obtuviesen una puntuación de 5 en los pilares del Cuidado y de la Pureza?
                   
     

Ética e impuestos


El método filosófico estándar para el análisis de las proposiciones éticas es el “razonamiento práctico”. A pesar de su importancia en la política impositiva, nunca ha formado parte de la metodología económica convencional. En consecuencia, en gran medida los economistas han ignorado los aspectos éticos de los impuestos”. Paul Collier


  Una sociedad, que no sólo no descuide, sino que mantenga estos dos pilares (Cuidado y Pureza) en un umbral alto, requiere disponer de recursos. El Estado se sostiene a través del sistema impositivo.  Es este un problema complejo que no se resuelve con soluciones simples. Tal vez una forma de abordarlo y resolverlo pudiera ser que en  un marco de enfoque ético, plantear, analizar y dar respuesta a estas tres preguntas:
                                                                                    




¿Quién decide los impuestos?



¿Quién paga los impuestos?



¿Qué proporción se debe recaudar a través  de impuestos directos   y que proporción de impuestos indirectos?

¿Cómo se gastan los impuestos?   






Se habla con cierta frecuencia del nuevo “orden mundial” Más bien habría que llamarle el nuevo desorden mundial. No se trata de añorar viejos tiempos pues no es cierto,  a mi juicio,  aquello de que “cualquier tiempo pasado fue mejor”, pero llevamos ya un largo tiempo qie parece que todo va a peor.


Se puede sostener esta proposición no desde el pesimismo, ni mucho menos desde el optimismo de pandereta, lo cual supondría renunciar a su propia esencia; se puede sostener desde el optimismo funcional.

El domingo pasado,   en la Entrevista de Jordi Évole al  papa Francisco.

-        -Pregunta: ¿Es usted optimista?
-        -Respuestas: Es una palabra que no me gusta, porque al menos a mí me suena a maquillaje. Yo tengo esperanza en la humanidad.[8]

Leer:
VIRUS CULTURALES


 Hay grietas profundas que están desgarrando el tejido de nuestras sociedades. Están provocando nuevas ansiedades e iras en la gente, y nuevas pasiones en política”. Paul Collier

Noticias de los medios de comunicación.

"Graves tensiones en el sur de Italia: primeros saqueos en supermercados y llamadas a la rebelión



Otro desfile




Pero esta batalla contra la Covid-19, sin duda, se ganará, y ese será el momento de montar un nuevo desfile de la victoria. En ese caso deberán desfilar los científicos, los médicos, las enfermeras, los celadores, los farmacéuticos, los transportistas de víveres, las cajeras de supermercado, los empleados de la limpieza y también una parte del Ejército…

ttps://elpais.com/elpais/2020/03/28/opinion/1585407997_984523.html





Referencias Bibliográficas: 


[1] Haidt, J.: La mente de los justos. Por qué la política y la religión dividen a la gente sensata. Barcelona, Deusto, 2019  p.217

[2] Ibíd. P. 224

[3] Ibíd. P. 216

[4] Ekman P. ¿Qué dice ese gesto?  Barcelona, RBA Libros, S.A., 2004 p.220

[5]  Collier, P.: El futuro del capitalismo. Cómo afrontar las nuevas ansiedades. Barcelona, Debate, 2019 p. 170

[6]  Kass, L. R. The Wisdom of Repugnance. The New  Republic, 1997, pp.17-26

[7]Haidt, J.: La mente de los justos. Por qué la política y la religión dividen a la gente sensata. Barcelona, Deusto, 2019  p.429


domingo, 22 de marzo de 2020

LOS seis PILARES de la MORAL -2: CUIDADO














El pilar del  CUIDADO






                                               
                                                  Figura 1: Elaboración propia a partir de Haidt, J


Estos  seis pilares  tienen un carácter universal y están presentes en los fundamentos morales de todas las culturas.





El pilar del  CUIDADO

“El único propósito por el cual el poder puede ejercerse legítimamente sobre cualquier miembro de una comunidad civilizada, contra su voluntad, es para prevenir un daño a los demás” John Stuart Mill





Entendemos por Cuidado, de forma general, aprecio y protección de los demás.

“El fundamento del Cuidado/Daño evolucionó en respuesta al desafío adaptativo de cuidar a niños vulnerables. Nos hace sensibles a los signos de sufrimiento y necesidad; nos hace despreciar la crueldad y querer cuidar a aquellos que sufren "[1]



Decíamos en el post anterior,  que entendemos por ética la teoría (el estudio y reflexión) del comportamiento moral. A su vez, entendemos por moral, el conjunto de normas de conducta, el  modo de actuar,  que facilitan la convivencia.

La ética del cuidado, del cuidado de uno mismo, autocuidado, y del cuidado de los demás,  se fundamenta en la responsabilidad. La  responsabilidad se fundamenta en el concepto de libertad, la cual nos proporciona  la posibilidad de elegir hacerse cargo del resultado de nuestras decisiones tomadas, acciones llevadas a cabo y de las consecuencias que se derivan de las mismas. 


Vivimos en una sociedad en la que somos interdependientes :yo dependo de ti y tú dependes de mí.


La ética del cuidado va más allá del “toma y daca” en el que tenemos basado,  por ejemplo,  el pilar de la Equidad: “tanto me más,  tanto de doy”; el intercambio no está determinado por lo que alguien dio, sino por lo que alguien necesita en una situación determinada y en el  deber  universal.

Tenemos actualmente magníficos  ejemplos en el día a día, debido a la pandemia del coronavirus que estamos viviendo. Ejemplos de cómo nos cuidamos de nosotros mismos respetando las normas de confinamiento que los profesionales de la salud nos marcan. Ejemplos de cómo cuidamos de los demás respetando las distancias, etc., para no infectarlos. Ejemplo paradigmático de cuidado de los demás que nos están dando todos los profesionales de la salud haciendo durante días y noches  un sobreesfuerzo con total entrega y dedicación.


Sabemos que son profesionales dedicados a ayudar a los demás,  lo cual suele comportar   una gran carga vocacional, que  puede llevar a situaciones en las que se despreocupen de sí mismos descuidando su autocuidado. Por eso a nosotros nos preocupan especialmente la respuestas a la siguientes preguntas: 

  











¿Pueden poner en práctica el autocuidado,  todo el personal sanitario,  dado los medios de los que disponen?


























¿Qué resultado tendría una evaluación de los riesgos psicosociales que menoscaban la integridad física y psíquica de los médicos, personal de enfermería, auxiliares de clínica, etc.?

¿Les sale positiva la percepción que tienen del balance entre las exigencias que le imponen su entorno laboral y los propios recursos de los que disponen para hacerle frente?


¿Es manejable el estrés que genera la toma de decisiones referidas a determinados dilemas éticos…?



López Guerrero (Neurovirólogo): "Es imposible que el coronavirus se haya creado en laboratorio"

“Dígame, ¿el sistema sanitario puede colapsar?, y ¿de verdad ante la falta de respiradores se está seleccionando quién vive y quién no?
Se está haciendo una selección porque no hay más remedio. Yo tengo un familiar en uno de los hospitales más colapsados de España: en el de Valdemoro, y todos los días llega llorando porque efectivamente han tenido que tomar la decisión de a qué persona mayor condenaban a muerte para poder salvar la vida de contagiados más jóvenes. Cuando pase esta pandemia, muchos de nuestros sanitarios van a tener un problema psicológico grave. En cuanto a si el sistema sanitario puede colapsar, creo que sí, aunque se están tomando medidas de guerra, como habilitar grandes superficies, tipo Ifema, y eso ayudará, sin duda”.













Pasada la pandemia,  y como lecciones aprendidas de la misma,  la obligación de buscar las respuestas.



Aunque el fundamento moral del Cuidado, está presente en todas las culturas, no todas lo entienden de la misma forma. Incluso, dentro de una misma cultura, en función del partido político al que nos refiramos y de la ideología de cada persona, también nos encontramos con distintas formas de entenderlo y practicarlo. Esto se  debe, entre otras razones, a que cada cultura tiene mecanismos que condicionan la forma de actuar de las personas que viven inmersas en ellas. Hay una gran variabilidad  cultural en el mundo y es ella la que explica que, ante situaciones de características similares,  demos comportamientos muy distintos.

Geert Hofste, psicólogo social,  llevó a cabo  una investigación  a través de  encuestas realizadas a empleados de la multinacional IBM (116.000 trabajadores)  en 40 paises, entre los años 1967 y 1973 y encontró 4 factores que según él eran suficientes para distinguir las diferentes culturas estudiadas: Distanciamiento al poder, Evitación de la incertidumbre, Masculinidad – Feminidad e Individualismo – Colectivismo.

  Podemos relacionar cada uno de ellos con Los 6  Pilares de la Moral, pero,  para desarrollar el que hoy nos ocupa, el pilar del Cuidado, vamos a ocuparnos del  factor de Individualismo – Colectivismo:

Comprende una preferencia por entornos sociales poco cerrados en los que se supone que son los individuos los que tienen que cuidar de sí mismos y sólo de sus familias cercanas, que se contrapone a una preferencia por la armonía en el grupo de pertenencia, por cumplir sus metas y expresarle lealtad a cambio de protección”. [2]       


Como ejemplo práctico,  a partir de su Índice de Individualismo, Geert Hofste clasifica como individualistas  a Australia, Estados Unidos y Gran Bretaña y como colectivistas a Colombia, Pakistán y Venezuela. España se encontraría en una posición intermedia.  

¿Entenderán de igual forma el fundamento moral del  Cuidado una cultura individualista y otra colectivista?

Los individualistas desarrollan con intensidad los valores de autonomía y responsabilidad. En este tipo de culturas, las metas de las personas consideradas individualmente,  tienen una prioridad más alta que las metas del grupo. La socialización de estas personas pone el énfasis en cuidar de sí mismas, tener ideas y criterios propios y tomar sus propias decisiones. Utilizan en sus negociaciones criterios de intercambio, y a lo largo de su vida van perteneciendo a difidentes endogrupos, identificándose con ellos como miembros del mismo y psicológicamente.  En las culturas individualistas, aquellas personas que no alcanzan sus metas o no cumplen con sus responsabilidades se ven invadidas por el sentimiento de culpa.

Las segundas, las culturas colectivistas, las personas adquieren su identidad en función de los grupos de los que forman parte: importa más el grupo que la propia persona y se da una fuerte tendencia a la cooperación, al cuidado  y al cumplimiento con los demás. Dentro de los grupos, los individuos mantienen fuertes relaciones entre sí y suelen compartir los mismos intereses.

Resumiendo,  cabría señalar que la independencia emocional y la autonomía de las personas con respecto a grupos u otras organizaciones son características del individualismo, y su contrario, la dependencia emocional y la interdependencia son característicos del colectivismo.

¿Qué país estaría en mejores condiciones de hacer frente al coronavirus, un país individualista o un país colectivista?


 Los 6 Pilares de la Moral pueden utilizarse como una escala multidimensional para analizar la práctica de la política. Van más allá que una escala unidireccional del tipo Individualismo – Colectivismo, o la tan conocida de Izquierda – Derecha.  En función de cómo cada ideología  y cada partido político priorice y se esfuerza en defender cada uno de los 6 Pilares de la Moral podemos llegar a análisis más profundos y acertados que los que nos permitiría una escala unidireccional.

De momento vamos ver cómo priorizan y se ocupan del Cuidado  tanto la Derecha como la Izquierda, escala unidireccional a lo largo de la cual, en algún punto determinado nos ubicamos la mayoría de las personas pertenecientes a la cultura occidental, personas que formamos el  acrónimo W.E.I.R.D., las siglas de “Western, Educated, Indusstrialized, Rich and Democratic”, personas occidentales, educadas, industrializadas, ricas y democráticas. El acrónico se debe a los psicólogos culturales Joe Henrich, Steve Heine y Ana Norenzayan.

Cuando nos declaramos de izquierdas o de derechas estamos poniendo de manifiesto cual es nuestra ideología. La cuestión viene de lejos,  de 1789. En la Asamblea unos delegados se sentaban en el lado derecho y otros lo hacían en el lado izquierdo. Los situados a la derecha partidarios de preservar el orden natural mientras que los situados a la izquierda defendían el cambiarlo. Desde entonces  el término derecha se refiere a los conservadores y el término izquierda a los liberales.

Jost, J. T.  nos aporta la siguiente definición de ideología:

“Un conjunto de creencias sobre el orden correcto de la sociedad y cómo puede lograrse” [3]



¿Entenderán  el Cuidado de igual forma personas que vivan  en una misma cultura y que unas se declaran de “izquierdas y otras de “derechas”?

Jonathan Haidt  estudioso e investigador del espectro político de Estados Unidos sostiene que los partidos políticos se esfuerzan por activar nuestros módulos morales con el objetivo de lograr nuestro voto. Según él, los liberales (izquierda) dan más prioridad y practican con más intensidad el valor del Cuidado que los conservadores (derecha)

“… el cuidado de los conservadores es algo diferente: no está dirigido a los animales ni a personas  de otros países, sino a aquellos que se han sacrificado por el grupo. No es universalista; es más local, y está mezclado con la lealtad” [4]                       

                                                                                                

«La moralidad es la extraordinaria capacidad humana que ha hecho posible la civilización». [5] 


Referencias Bibliográficas: 



[1] Haidt, J.: La mente de los justos. Por qué la política y la religión dividen a la gente sensata. Barcelona, Deusto, 2019  p.223


 [2] Ros M. y Gouveia V.: Psicología social de los valores humanos. Desarrollos teóricos, metodológicos y aplicados. Editorial Biblioteca Nuena, S.L., Madrid, 2001 p. 177

[3] Manzano-Arrondo, V. 2017. “Ideología y aversión ideológica”. Revista Internacional
de Sociología 75 (3): e068. doi: http://dx.doi.org/10.3989/
ris.2017.75.3.15.117

[4] [1] Haidt, J.: La mente de los justos. Por qué la política y la religión dividen a la gente sensata. Barcelona, Deusto, 2019  p.200
                     
[5]  Collier, P.: El futuro del capitalismo. Cómo afrontar las nuevas ansiedades. Barcelona, Debate, 2019,             





domingo, 15 de marzo de 2020

VIRUS CULTURALES: OPTIMISMO DE PANDERETA








VIRUS CULTURALES

Memoria selectiva para recordar lo bueno, prudencia lógica para no arruinar el presente, y optimismo desafiante para encarar el futuro.”

Isabel Allende



Llevamos tiempo conviviendo con un virus muy potente. No pertenece a la familia de los corona virus pero puede llegar a ser, en casos extremos,  tan letal como este: es el virus del “optimismo de pandereta”. Pulula en el mundo virtual de las redes sociales y en la vida real se ha colado en los distintos ámbitos y esferas de nuestro mundo social. Ataca exclusivamente al cerebro. 


Sus profetas divulgan, recurriendo a la pedagogía del loro de repetición,  todo un conjunto de mensajes pertenecientes a la familia del  “pensamiento positivo”,  transformando cualquier situación, por muy trágica que esta sea, en otra  propicia para “ser feliz”. Logran semejante proeza, recurriendo a toda la gama de sesgos cognitivos que los seres humanos traemos de fábrica, y con los cuales podemos fabricar  interpretaciones falaces, inexactas, irracionales e ilógicas,  que nada tengan que ver con los datos objetivos que nos muestra la realidad. ​ 

Resumiendo, los profetas del optimismo de pandereta logran esta transformación utilizando  una extrema subjetividad,  y  recurriendo  a  la distorsión manifiesta  e interesada de la realidad.

Es este el paradigma dominante de la sociedad de nuestro tiempo y si alguien  no se enrola en el mismo,  se arriesga a ser condenado al ostracismo social, laboral, e incluso al educativo en el cual, es fundamental,  que haya una conexión entre las ciencias que se preconizan y los hechos objetivos que se dan en la vida de las personas.  

Si tus propuestas no sintonizan de forma absoluta con sus postulados  estas fuera de juego.


Ha habido una generalización  desde el mundo de la política al mundo social, en general,que explica muy bien aquella famosa frase de “el que se mueva no sale en la foto”
Se busca la conformidad entendida según la experimentó Solomon Asch el cual nos permitió conocer cómo influyen los otros en nuestra opinión, hasta el punto de  que aun  cuando tenemos la respuesta correcta, en muchas circunstancias, preferimos optar por seguir la opinión de otros para sentirnos aceptados en un grupo.
                                  




El grupo de los del “optimismo de pandereta” practica y exige la inhibición y se declara firme enemigo de la asertividad pasándose a la agresividad,  excluyendo y eliminando, de su esfera social,  a todo aquel que discrepe de sus postulados generando consecuencias de toda índole para el afectado.  No sólo cuenta con “encantadores de serpientes”, sino,   además, con  personas que siguen el juego a otras  que tienen  poder para tomar decisiones  que pueden facilitar  o dificultar mucho la vida de otras personas. Por resumir la cuestión: 




La estructura de este virus se forma a partir de unos emisores de los mensajes.  Estos mensajes,  se componen a partir de la utilización de falacias y otros sesgos que benefician al emisor. Los receptores de los mensajes deben, necesariamente,  “comulgar” con ellos sin el más mínimo cuestionamiento, sabiendo,  que si lo hacen,  se deja de contar con ellos, por lo que deben, antes de hacerlo preguntarse de cuantas opciones disponen como alternativa a la que tienen  en estos momentos.

El paradigma social del optimismo de pandereta crea una realidad ficticia, no existente, con el objetivo de manipular y someter a la mayoría de las personas a unas condiciones deplorables,  en beneficio de una minoría, llevando a la práctica, de forma extremista, el llamado Efecto Mateo


"Al que más tiene, más se le dará, y al que menos tiene se le quitará para dárselo al que más tiene".   

Es la versión moderna de la “banalización del mal”. Ya no tenemos con nosotros a Hannah Arendt que nos sugería que dada nuestra condición humana, deberíamos estar atentos.  

En la ciencia, cuando el paradigma dominante empiezan a salirle muchas lagunas y se encuentra con dificultades para explicar racionalmente determinadas parcelas de la realidad, es reemplazado por un nuevo paradigma emergente que da explicaciones más ajustadas de la misma.


 Es urgente reemplazar el “Optimismo de Pandereta”  por el “Paradigma del Optimismo Funcional”


Para que ello ocurra, lo primero es  empezar  por dotarnos todos y cada uno de nosotros, del valor de Autonomía Intelectual, el cual nos permite mostrarnos como una entidad autónoma para perseguir nuestras propias metas e intereses intelectuales siendo curiosos y de mente abierta. Esto nos permitirá no ser un mero títere que se limita a seguir puntos de vista ajenos, sino, lo que es más importante, esforzarse en distinguir entre lo verdadero y lo falso.

Sería bueno, a mi juicio, que cada vez que nos lavemos las manos (no metafóricamente,  no comprometiéndonos con las situaciones), sino con agua y jabón para protegernos  del coronavirus, aplicáramos la profilaxis ante el virus del optimismo de pandereta haciéndonos las siguientes preguntas:





¿Cómo percibo yo  el mundo?

¿Cómo utilizo mi atención en el mundo y llego a ser consciente del mismo?

¿Cómo llego a saber?






Entrevista de Jordí Évole al  papa Francisco.

- ¿Es usded óptimista?, le pregunta Évole
 - Respuesta del papa Francisco: 

 "Es una palabra que no me gusta, por que al menos a mí me suena a maquillaje. Yo tengo esperanza en la humanidad." 



Es necesario traspasar el Poder (Estatus social sobre las personas y los recursos) que actualmente tiene el optimismo de pandereta,   al optimismo funcional en forma de Logro (Éxito personal mediante demostración de competencia según criterios sociales)