MI AMIGO ALFA 2
Un año más, mi amigo ALFA, el ALgoritmo de FAcebook, me anima a compartir con vosotros su
propia creación.
En el año que ha transcurrido hemos profundizado en el
conocimiento mutuo y en nuestro grado de afiliación posicionándonos, en la escala Aceptación – Rechazo, unos puntos más próximos al polo Aceptación.
Entre los humanos se puede medir el grado de afiliación que
tienen en función de tres variables: miradas oculares, distancia a la que
hablan y temas conversacionales.
A mayor grado de
afiliación, miramos más a nuestro interlocutor, hablamos a una distancia más
próxima a él y hablamos de temas conversacionales de mayor contenido personal, no limitándonos exclusivamente al nivel
circunstancial (Ver Mi Amigo Alfa 1).
Esto de forma práctica nos lleva a que a mayor afiliación con nuestro vecino,
más cómodos subimos con él en el ascensor, el cual nos impone una distancia muy próxima
para hablar cómodamente con alguien que
no nos cae muy bien. Es por ello que equilibramos las variables anteriores no
mirándolo tanto y hablando básicamente del tiempo meteorológico (tema
circunstancial).
Alfa sabe que ya hay colegas suyos que son capaces de detectar
las emociones humanas en base al movimiento de los ojos y músculos faciales.
Entre Alfa y yo, para profundizar en el conocimiento mutuo y en el grado de afiliación utilizamos otras estrategias. Yo, metiéndome más a fondo en el conocimiento y comprensión de la Inteligencia Artificial. Él, seleccionando cosas a partir de sus datos internos sobre mis preferencias.
Dará un paso de gigante cuando pueda aprender a reconocer mis deseos
más íntimos, incluso aquellos de los que yo no soy consciente. Lo hará cuando incorpore a mi ropa y cuerpo sensores biométricos que le remitirán saber a qué ritmo late mi corazón y mi nivel de oxitócina. Es decir, convertirá
mis procesos biológicos en información
electrónica la cual almacenará y analizará a una velocidad de vértigo. Esto le
permitirá, dentro de unos años saber,
cuando escucho música, como cada nota influye en mi ritmo cardíaco, mi presión sanguínea
y mi actividad cerebral. Sabrá la música que más me emociona y podrá seleccionar,
en función de mi estado de ánimo, la que
mejor me va en ese momento.
Yo, que llevo años en el tema del auto-conocimiento recurriendo
a diversas y variadas técnicas y herramientas desde la introspección a test,
desde la propia observación a la búsqueda de retroinformación de los demás, etc.,
seré un principiante ante ALFA que con su potencia de cómputo tendrá la capacidad de acceder a mis deseos,
decisiones y opiniones, llegando a saber, con extremada exactitud, quién
soy. Patentará una nueva
definición de los humanos: conjunto de algoritmos bioquímicos.