Primero tú (2)
“Pese a todo, algunas de las encrucijadas de mi vida habían sucedido conduciendo este Morris, que durante unos diez años estuvo unido al placer de los primeros viajes con mi mujer, a nuestras disputas , gritos y reconciliaciones”
Terminamos el artículo anterior 'PRIMERO TÚ (1)', con una pregunta y una respuesta:
¿Hay algún aspecto de ti que te gustaría mejorar?
Figura 1: Elaboración propia
Y una respuesta: La mayoría de personas dicen que sí, que les gustaría mejorar un número más o menos amplio de cosas, ya sea referidas a sí mismas, a algunas áreas de su vida, a algunos objetivos a alcanzar o a algunos aspectos que les gustaría modificar.
Empezamos el de hoy 'PRIMERO TÚ (2)' sosteniendo que otras personas consideran que nacieron así, y que no hay remedio. No son conscientes de que nos estamos haciendo todos los días, que nadie nace totalmente hecho y que cada uno de nosotros nos estamos construyendo diariamente, unos para mejor, otros para peor. No sólo cambiamos físicamente, lo cual es evidente; ¿reconocerías por la calle a un amigo de tu adolescencia que no lo hayas vuelto a ver en los próximos veinte años?. También cambiamos psicológicamente, de gustos, de motivaciones, de aficiones, de forma de pensar: ¿piensas lo mismo hoy que hace veinte años?
Esa construcción puede ser aleatoria, fruto de lo que por azar te vaya sucediendo en la vida, o puede ser, en buena parte, controlada por ti, fruto de una planificación calculada y autodirigida.
“Definir a una
persona y no aceptar su radical mutabilidad es como meter a un animal en una
jaula. Un león enjaulado no es un león, sino un león enjaulado; y eso es muy
distinto. [..] Actuamos siempre conforme a la sabiduría que tenemos en cada
momento, y si actuamos mal es porque , al menos en ese punto , había
ignorancia. Es absurdo, condenar la ignorancia pasada desde la sabiduría de
presente.”
Si te encuentras entre estas personas que se quieren convertir en constructores de si mismos (para mejor) te damos la bienvenida y esperamos serte de ayuda a través de los artículos que aparecen en este blog. Nos interesa, especialmente, la motivación trascendente: me gusta lo que hago ya que aporta valor y beneficia a muchas personas.
Figura 2: Elaboración propia
¿Cómo podemos ayudarte?
Primero, clarificándote, de entrada, algunos puntos esenciales.
Mucha gente espera encontrar una estrategia definitiva, algún truco o
atajo que le lleve de forma rápida a la situación deseada. Decirte que no, que
no hay trucos, recetas ni atajos.
¿Entonces...? hay herramientas eficaces que si las aplicas con disciplina, tesón y
esfuerzo, te garantizan que incrementas mucho las probabilidades de alcanzar tu
situación deseada.
Otras personas están convencidas de que adquiriendo conocimientos ya es suficiente para cambiar el o los aspectos de su vida que desea. No. El conocimiento no es suficiente. Nada funciona si no lo llevas a la práctica. El conocimiento no es una herramienta, la práctica sí. La práctica realizada con la metodología que aquí te propondremos, siempre funciona. Con esto no queremos decir que el conocimiento no sirva para nada. ¡Claro que sirve! Sirve para mucho más de lo que algunos se imaginan. Pero, en este contexto, en el que nos vamos a desenvolver nosotros, no es suficiente. Hay que llevarlo a la práctica.
Puedes profundizar:
https://neuroforma.blogspot.com/2023/12/control-personal.html
¿Cómo adquirimos el conocimiento? Siendo curiosos. Haciéndonos la pregunta ¿por qué...? Es la pregunta que más hacen los niños. La curiosidad del niño le lleva a averiguar el porqué de las cosas que suceden a su alrededor. El asombro del niño ante el mundo. Ya no eres niño, pero, ¿sigues siendo curioso?, ¿sigues teniendo capacidad de asombro?, ¿sigues preguntándote por qué?
Si has respondido a estas preguntas de forma afirmativa, ya estamos en
el buen camino. Ahora, para llegar al final del recorrido, sólo nos hace falta
que tengas la voluntad necesaria para aplicar las herramientas que te
descubriremos. Entendemos por voluntad, que es un término muy resbaladizo, la
capacidad de posponer gratificaciones inmediatas, por la obtención de
gratificaciones futuras de mayor valor. La gratificación futura de mayor valor,
es la situación deseada que tú te marques. Las gratificaciones inmediatas, son
aquellas que te impiden acercarte a esta meta, lo que te gusta pero no te
conviene. Trabajamos en nuestros talleres de formación con algunas herramientas que nos permitirán
que la razón (lo que me conviene), trabaje en equipo con la emoción (lo que me
gusta). Sólo así progresamos con
consistencia.
Sólo así se genera
conocimiento práctico. En nuestra opinión, una formación de adultos que no
tenga en cuenta y no sepa aprovechar la
experiencia de los asistentes, es una
formación deficientemente diseñada.
El próximo artículo vamos a titularlo:
Primero tú (3)
3: Elaboración propia
Hoy El País no publica la columna que habitualmente publica Manuel Vicent. Las vacaciones de Agosto mandan.
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